Día de la Mujer.
En la celebración del día de la mujer, una muestra del talento de una de nuestras profesoras: Yulieth Herrera.
Otra actividad que fomenta la sana convivencia y una ocasión para pensar en la
dignidad de la mujer:
¿En qué radica la dignidad de la mujer? ¿En su ser mujer o en algo anterior? Quizá habría que preguntarnos antes: ¿qué es “dignidad”?
¿En qué radica la dignidad de la mujer? ¿En su ser mujer o en algo anterior? Quizá habría que preguntarnos antes: ¿qué es “dignidad”?
Dignidad es una palabra que indica una apreciación, una valoración de algo o de
alguien. La dignidad depende de “algo” intrínseco, profundo, propio de uno,
independientemente de si los otros ven o no ven ese “algo”. La dignidad radica
en el poseer (mejor, en el ser) algo que merece, por sí mismo, amor, respeto,
justicia. Algo que radica en el sujeto digno, y que no puede ser despreciado
sin faltar a la verdad (cuando no descubrimos o incluso negamos el valor de la
persona digna) y a la justicia (cuando no la tratamos del modo que merece ser
tratada).
Cuando se habla de “dignidad”, por lo tanto, no se habla de funcionalidad, o de la contribución que alguien ofrece en un sector de la vida social. La dignidad no radica en la productividad, ni en la riqueza, ni en las cualidades físicas que otros puedan individuar en la persona digna. Ser digno no depende, por lo tanto, de motivos externos. De lo contrario, serían otros los que atribuyen dignidad a la mujer (o al hombre, o al niño, o al anciano).
Formulemos nuevamente la pregunta: ¿en qué radica la dignidad de la mujer? Una posible respuesta nos dirá que en su condición femenina, en su identidad sexual, en su apertura a la maternidad, en las posibilidades laborales que el mundo moderno ofrece a su libre opción. Esto, sin embargo, no es propio o exclusivo de la mujer, pues también se dan estas características en otros seres vivientes, sin que por ello sean dignos.
Entonces, ¿cuál es la respuesta? Quizá tendríamos que reconocer que la dignidad de la mujer radica en su ser persona humana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario